En nuestra vida estamos constantemente expandiéndonos o reduciéndonos, abriéndonos o encogiéndonos, prosperando o limitándonos. A menudo ni siquiera sabemos o no nos damos cuenta que estamos reduciéndonos, encogiéndonos o limitándonos, porque estamos acostumbrados a vivir este tipo de experiencias y no reconocemos que las cosas pueden ser distintas.

Muchas personas en nuestra sociedad viven y actúan con miedo, ira, vergüenza, culpa y una profunda desconfianza en sí mismos, en los otros y en el mundo espiritual. Muchas veces la gente sólo se proyecta en el futuro o visita constantemente su pasado, va deprisa, corre, sin notar apenas el presente.

En este punto de depresión, ira, miedo las enfermedades crecen y la vida pierde sentido. Se necesita una enorme cantidad de energía vital para suprimir las emociones y los traumas que hayamos vivido. Algunas personas se agotan incluso antes de salir de la cama.

Vivir nuestros sentimientos

A lo largo de nuestras vidas, a muchos de nosotros se nos ha dicho que no es muy venerable expresar y vivir nuestros sentimientos, especialmente si estos sentimientos son densos. Enfadarse o molestarse está mal visto, es por eso que muchas veces no le damos valor a lo que sentimos. Así que nuestros sentimientos no tienen a donde ir y se quedan en nuestro interior.

En lugar de sentir nuestras emociones y dejar que la energía de nuestros cuerpos y de nuestra vida fluya, la mente empieza a tomar las riendas y empezamos a pensar, diseccionar y juzgar. A menudo la gente me dice que superó algún problema del pasado, lo pensó, lo habló y lo solucionó. Sin embargo, ese problema en un momento u otro vuelve a surgir. La realidad es que si sigue apareciendo, quiere decir que no lo ha solucionado o todavía hay más que solucionar.

Si es así, tal vez empecemos a morir poco a poco, a envejecer, a perder nuestro entusiasmo por la vida, porque esta se convierte en un concepto mental en lugar de una experiencia espontánea, creativa y alegre. Se puede sentir como la película, Atrapado en el Tiempo, donde cada día parece ser el mismo.

Transformación Celular Profunda

Le digo a la gente que cuando has liberado algo a nivel celular, energético y emocional, te das cuenta claramente que no tiene nada que ver con sólo pensarlo o cambiar la idea. Si la liberación es realmente profunda, simplemente ya no puedes pensar de la misma manera que antes, porque tu punto de vista general cambia y la carga del patrón que te ha estado controlando, ya no lo puede hacer más.

La transformación celular profunda comienza a menudo cuando nos damos permiso de reconocer nuestras heridas, la ira, el hecho de haber sido agredidos, malinterpretados y no escuchados. Al mismo tiempo podemos invitar al Espíritu o a nuestra propia Inteligencia Divina Sanadora a que nos ayude a liberar la densidad, los bloqueos, la falta de vida y el agotamiento que se ha creado.

A través de este proceso podemos limpiarnos del dolor y ser liberados de las limitaciones que hemos puesto en nuestra alma. Esto permite que la Luz en nuestro interior pueda brillar.

Dolor Escondido

Mi experiencia ha sido que a menudo desechamos las ideas traumáticas de nuestra memoria, y que no tenemos ni la más mínima idea de lo que se encuentra debajo; el dolor, la tensión, el miedo y los patrones que han controlado nuestras vidas.

Tuve una experiencia de sanación profunda a través del proceso de escribir este artículo, donde descubrí mucho dolor escondido y trauma que ni siquiera sabía que tenía.

Cuando era inocente y emocional, como una niña, un miembro de mi familia proyectaba su propia ira y vergüenza en mí. Descubriendo esta experiencia y trabajando en ello, he transformado de manera profunda la manera en la que reacciono y vivo mi vida. Curiosamente mi relación con este pariente se ha transformado, pasando de un profundo malestar en gran respeto. Sentí como si estuviera más presente, participando activamente en mi vida, en lugar de repudiarla o temerla.

Estableciendo Patrones

Como practicante de Visionary intuitive Healing®, veo a muchos clientes con problemas similares. Recientemente estaba trabajando con un hombre de unos sesenta años que tenía un miedo enorme al compromiso. Mientras me conectaba a su cuerpo, descubrí que cuando tenía un mes, su padre murió. En algún punto, a un nivel subconsciente, pensó que su madre era la responsable de esa muerte. Como consecuencia, un patrón se había establecido en él para alejar a las mujeres, eso fue lo que estuvo haciendo toda su vida. Mientras liberaba esta memoria, todo su cuerpo empezó a temblar y a re-alinearse. Al terminar esto, se marchó sintiéndose otra persona. Un tiempo después, me comentó que se sentía mucho más tranquilo y en paz y que ya no tenía miedo al compromiso.

Decisiones Subconscientes

Otra de mis clientes Debbie me llamó como último recurso. Me dijo que durante los últimos veinte años, no importaba lo que hiciera o a quien consultara, no podía perder peso. Se sentía muy desanimada y harta. Lo primero que ví fue un alambre de púas alrededor de su garganta. Me dijo que ya no tenía problemas de garganta pero sí tenía cuando era joven. De hecho se tuvo que operar para extirpar las amígdalas. Dijo que empezó a subir de peso después de esa operación.

Mientras me conectaba a las memorias  de su cuerpo, descubrí que tomó una decisión subconsciente, que para vivir tenía que subir de peso. Esto no se lo dije a Debbie porque fue una sesión a distancia, pero cuando Debbie me volvió a llamar y me dijo que había tenido una aparición, me comentó que había recordado que durante la operación pensaba que iba a morir y que para vivir necesitaba ser más pesada. Su cuerpo escucho y cumplió la tarea.

Fue maravilloso ver que casi todo lo que ví y en lo que trabajé durante la sesión de sanación de Debbie, ella lo experimentó también. También me dijo que ella era muy intuitiva con los demás, pero que no podía usar esa intuición para sí misma. Cuando trabajé con ella también ví un bloqueo en sus chakras superiores. Una vez que se liberaron estos bloqueos ella pudo conectarse a sí misma, dejar ir los problemas y auto sanarse. Debbie dijo que instantáneamente se sintió más ligera y que la energía pesada que había estado llevando durante años se modificó.

Romper Tus Patrones

La verdad es que los patrones que llevamos se pueden romper si somos guiados por el camino correcto y tenemos el valor de enfrentarnos a nuestra parte oscura, aprender las lecciones y limpiar la pesadez. Solo podemos recuperar la luz cuando la densidad se ha ido, de otra manera la luz no se puede mover a través de nosotros y no podemos liberarnos verdaderamente. La libertad y la luz es nuestro derecho. Abajo hay un ejercicio corto que puedes empezar a usar para auto-sanarte.

Transformación Celular Profunda – Ejercicio

Encuentra algun sitio donde estés solo(a). Permítete tomar algunas respiraciones y sé consciente de las sensaciones de tu cuerpo. Toma consciencia de cualquier bloqueo, tensión, incomodidad o supresión de lo que sientas. Después llama a la Inteligencia Divina, y di en voz alta: Inteligencia Divina de sanación, te pido que vengas a mi espacio y me ayudes a liberar cualquier tensión, densidad, bloqueo, miedo, impaciencia, falta de confianza, ira y todo lo que necesite liberar.

Asegúrate de sentir lo que estás diciendo, porque esto puede ser muy poderoso. También, toma consciencia de tu respiración; estás respirando de manera superficial o profunda? Por lo general es más fácil conectar con más sensaciones cuando se respira profundamente.

Puedes pedir a La Inteligencia Divina de sanación que vaya más adentro y más profundo hacia cualquier tipo de dolor, tensión y miedo y que lo traiga a la superficie y lo libere. También puedes pedir que cualquier miembro de tu familia, amigos o gente cercana a ti beneficien de esta sanación.

Siéntete libre de comunicarte con la Inteligencia Divina de Sanación cada vez que lo necesites, ella nunca se cansa de ayudarte. De hecho le encanta ayudarte a sanar. Es tu regalo divino el poder limpiar y expandirte hacia el amor.

Al final, agradece a la Inteligencia Divina de Sanación por la ayuda que te ha dado.

Inna Segal es la creadora de Visionary Intuitive Healing® y la autora del libro El Lenguaje Secreto del Cuerpo.